La navidad diferente. Parte 1

Esta navidad, decidí que no iba a ser aguafiestas. Decidí que iba a hacer algo que me gustara, y que sobretodo le gustara a mis hijos. 

Parte 1: Mi casa, la decoración. Aquí me copio un poco del espíritu festivo que mi mami tenía en esta época. Arreglaba la casa con un gusto exquisito, una cosa extraña entre aparatos de música, televisores, telas rojas, velas y cabecitas de ángeles cuzqueños por las paredes.

Imágenes traslúcidas

Me di cuenta que entre todos los blogs de decoración que veo a diario, las cosas que más me llaman la atención son los móviles. Al final todo ha terminado colgando de alguna parte, hasta taladré las paredes del comedor para colgar las figuritas traslúcidas que ven a continuación. Lo que más me gusta es el sonido que hacen cuando se mueven con el viento.

La estrella con flores y luces

Hice la estrella siguiendo las instrucciones que encontré en un blog, pero con los colores navideños de mi casa: naranja, rojo y verde. Además también me gustaron unas flores de papel de seda con un super volumen. Y ya. Lo puse todo junto.

Este fue el resultado:

Estrella: http://www.jennyharada.com/fun-diy-christmas_card_star.html

Flores: http://kindawonderful.typepad.com/pink_paper_peppermints/2008/05/crafty-flowers.html

En la parte 2 de navidad vendrán los regalos que les hice a mis sobrinos.

Fotos: yo 

ES-CULTURA

Un feliz día de diciembre del 2005 se me ocurrió hacer una de las cosas que tenía como pendientes, meterme a clases de escultura. No me acuerdo cómo llegué a Edith Sachs (http://www.edithsachs.edu.pe/). Un lugar espectacular, una casa miraflorina en la que me hubiera gustado vivir, con escaleras de madera que suenan cranch cuando las subes, con ambientes bien iluminados, y por supuesto con jardín y patio relax. Pero creo que lo más importante era el tipo de personas que hacían de este instituto un lugar cómodo y especial dónde ir a trabajar, disfrutar, intercambiar historias, hacer amigos, en fin, conocer otras experiencias, era como si entraras a tu propia casa. Silvia (hija de Edith) es la responsable de este particular ambiente.

Yo en esa época andaba todo el día pegada a la compu trabajando en diseño gráfico. Quería hacer algo con las manos, entonces me matriculé con Aldo Shiroma para hacer escultura en madera. Creo que no pude encontrar mejor profe. Todos los que conocen a Aldo, saben de sus ganas de enseñar y de no quedarse nada para él, el desprendimiento total. Por cierto, Aldo tiene una expo que va hasta el 5 de enero 2011 en la galería forum (http://www.galeriaforum.net/content/index.php) a la cual quiero ir, tomar fotos y hacer un post.

Todo ese lindo verano me la pasé dándole y dándole al formón con el martillo de goma. Y en los 2 meses que duró el taller pude hacer 2 esculturas. La tarea era medio complicada, no sólo por el esfuerzo físico, ni por llevar la idea desde tu cerebro a la madera, sino porque había que conseguir la materia prima de donde pudieras. Me la pasé viendo todos los centros de acopio municipales por la ventana del carro y me bajaba como loca para ver si estaba "buena" la madera, incluso coquetié con algunos jardineros. También tuve la suerte de que el enamorado de la hermana de una amiga, me regalara trozos de madera. Al final lo logré. Y fue una gran satisfacción haber tenido este taller. Y ahora, luego de poner mis vértebras en su sitio, espero poder tomar en mis manos el martillo y el formón de nuevo.

Esta es la primera. Esas formas simpre las dibujo, de ahí la idea.

Otro ángulo.

Esto fue producto de un ejercicio de piezas complementarias.

Otro ángulo.

Foto de la pizarra. Ahí lo dice "BUSCAR MADERAS!".

Mírame si quieres

Otra vez, volviendo a las herencias de mi madre. Esta figura la guardaba en el cajón de su velador. No sé porqué. Quizás porque como yo, quería arreglarla y finalmente ponerla como parte de la decoración de la casa. ¡Pronto! Mientras tanto, le tomo fotos.

Me muero por esta pieza. Debe ser el glamour de la ropa, del peinado. Mujer con ojos cerrados: "Mírame si quieres".

Ahí va.

Fotos: Yo misma ofcorrs.

Esta foto me recuerda al Mago de Oz.

Misterio sin resolver.

¡Zapatos rojos!

Ese vestido, yo lo quiero.

Un japi verdei de banderas, papel pintado y mucho fodch.

  ¡¡¡Hoy celebramos un día muy especial en la familia!!!!

Para el papel de regalo pintamos papel con acuarelas de varios colores.

Aquí adentro están felices los Stoogies, Die Toten Hosen y The Fall.

Me encanta el grano que tiene la textura de la acuarela.

Banderitas en preparación.

Papel de color + mondadientes + cola = banderitas multicolor.

Las banderitas y bolitas fueron hechas por mi hijo de 8 años.

Mmmmmmmm.

Fotos: Ximena Barreto

Yoda Vs Darth Vader, tiene solución.

En una de tantas tardes en que mis hijos juegan con sus espadas de Star Wars (creo que no hay niño que no le gusten), decidieron llevar el juego al dormitorio de uno de ellos, que no tiene techo alto. Luego de varias caídas, golpes, cabezasos contra la pared, piso y etc, escuché un POOOOOOOOOM. Y enseguida un "correeeeeeeeeeeeeeeeee".

Rompieron algo que yo creí irrompible, una lámpara de plástico de 15 soles que colgaba del techo. Además por su puesto el foco ahorrador de bola, que la verdad, fue como una explosión, porque adentro no sé qué gases tiene que me hizo recordar los comienzos de la década de los 90.

Miré la lámpara de plástico y pensé que tenía solución.

Pasaron unos días.

Pasaron las amenazas maternales.

Me pasó lo molesta que estaba.

Y con 4 papeles bond, impresos en 2 diferentes tonos de verde y un poco de cola sintética curé a la lámpara.

¿cuánto durará hasta que Han Solo, Darth Vader, Yoda, o sabe dios quién vuelvan a hacerle una cicatriz más? 

Desconozco mayormente señoras y señores.

Fotos: Ximena Barreto

Flores: naturaleza impresionante

Siempre me han encantado las flores, mejor dicho, me han capturado. Mirarlas es una actividad que me encanta y en la que me puedo pasar horas. Tienen la combinación de la ciencia con el arte que me alucina. Esa explicación científica del porqué, en determinada parte de un pétalo, el color cambia, tiene su lógica, asi como 1+1=2. ¡Pero cómo podríamos explicar que esta lógica es completamente fabulosa para los ojos! ¡¿cómo?! No lo sé, pero de lo si tengo certeza es que nunca he visto una flor fea, huachafa, aburrida. ¡Que viva la naturaleza! He dicho.

Fotos: Ximena Barreto

Esta flor la descubrí cuando fui a comprar unas flores blancas que funcionaran para el blog de mi amiga Milagros Leiva. http://blogs.elcomercio.pe/semevaeltren/2010/06/no-me-lances-el-bouquet.html

Del blanco al morado

Lástima que no me acuerdo cómo se llaman.

Esta la tomé en Tarapoto. Me quedé pegada al magnetismo de la selva. En otro post les contaré de nuestra maravillosa selva.

Shismay es un pequeño poblado de Huánuco. Esta maravilla crece ahí, como el pasto.

La Margarita es mi favorita. Sencilla y potente.

Los botones de mi mamá

Este es uno de mis favoritos

Texturaaaa

Blanco para un saco sesentero

Crudo

Cuando era niña no había escondite que se me escapara en la casa. Si a alguien se le perdía algo, me preguntaban y yo respondía con la ubicación precisa. Así, tenía todo absolutamente clasificado en mi cabeza.

Entre las inspecciones rutinarias a los cajones de mi mamá, siempre me detenía en la lata de sus botones. Me parece que eran de cuando ella era muy joven. Entre muchas otras de sus cosas, ¡me fascinaban! Mi mamá cosía, le encantaba, se hacía ropa para ella, para mi y mis 3 hermanas. Siempre habían Burdas por mi casa, retazos de telas que yo la acompañaba a comprar. No había fiesta de prepre, pre o prom que mi mami no nos cosiera un vestido único, diferente y especial. “Vístete diferente al resto”, siempre nos decía. Y eso me ha quedado grabado en el cerebro para siempre.

Felizmente a las que quisimos, y que creo que fuimos las 4, mi mamá nos enseñó a coser y tejer. Y eso lo agradezco y disfruto infinitamente.

Siempre me pregunté para qué servirían sus botones, y la verdad, que yo me acuerde, ella nunca los usó. Lo digo porque ahora ¡los tengo!, lamentablemente sin la lata color negro con líneas blancas que ya no se dónde estará. Pero, ¡los tengo!, una de mis hermanas me los dio hace poco. Les he prometido a las 3 que les voy a hacer algo chévere con ellos, y así lo haré, en mis mil planes próximos está.

¿Qué tiene el look retro de estos botones de encantador?, ¿será que realmente tiene un valor estético especial, o será la nostalgia que siento por mi mamá y por mi infancia? Creo que una mezcla de ambas cosas.

Espero que este proyecto de botones de mi infancia me llene de alegría, tanto como a mi hermana mayor, quien hace unos días se encontró y compró, en los anticuarios de Surquillo, un reloj idéntico al que mi mami tenía en su velador. ¿O será el mismísimo? 

Fotos: Ximena Barreto